jueves, 11 de diciembre de 2008

Bella


Acabo de terminar de ver esta película protagonizada por Eduardo Verástegui: Muy buena.

La historia de este actor es curiosa. Cansado de tanta vanalidad, tanta superficialidad y la saturación de clichés del cine actual y de las telenovelas mejicanas, y también desesperado por no encontrar buenos papeles, este católico "reconvertido" a la puerta de una iglesia, decidió embarcarse por su cuenta y riesgo en este proyecto.

¿Y a quién acudes en Hollywood cuando necesitas ayuda para llevar a cabo un proyecto con trasfondo espiritual cristiano? Pues a los dos únicos actores con quién te puedes encontrar en misa en la ciudad de las estrellas: Mel Gibson y Jim Caviezel. Gracias a su financiación, esta película ha podido ver la luz.

Menos mal que todavía hay gente que quiere hacer películas con principios, con fondo, con algo más que efectos especiales. Me parece que es lo mejor que se puede decir hoy en día de cualquier película.

2 comentarios:

chüpetina dijo...

justo hoy pensaba ir a verla, así que no he leído el post entero :)

besos babosos

Shikilla dijo...

Ya estoy deseando verla, desde hace tiempo que me mandaron el boletín de HO.org, vi la vida de Eduardo Verástegui, fui a su página personal, un chico que realmente se compromete por la vida.

Te quiero desear, aprovechando el post, un año nuevo lleno de Bellas y muy bellas cosas, de momento ya tienes dos bellas a tu lado, disfrútalas.

Un beso